Luis, de naturaleza bondadosa, es la reencarnación del Emperador Celestial y desde pequeño ha tenido habilidades extraordinarias, aunque no las ha reconocido. Su abuelo, para ayudarle a recuperar el trono imperial, planeó un matrimonio con los Sánchez, pero Paula, al encontrar el Registro de Consagración de Dioses que Luis había arrojado, llegó para cancelar el compromiso. Justo en ese momento, Lisa, la hija de los Blanca, que tenía un compromiso con Luis, fue a buscarlo. Ella ya conocía el verdadero poder de Luis y comenzó a sentirse atraída por él. Paula no pudo hacerle frente a Lisa y huyó derrotada, intentando reabrir el Registro de Consagración para vengarse. ¡Así comenzó el proceso de consagración! Y la lucha por el trono apenas comenzaba.
Elsa, presidenta del Grupo Ruiz, y su esposo perdieron a su hijo biológico, David, cuando era pequeño. A lo largo de los años, volcaron todo su amor en su hijo adoptivo, Javier. Incluso después de que David regresara, Elsa siguió favoreciendo a Javier y le cedió la herencia del grupo. Sin embargo, nunca imaginó que Javier intentaría matarla. En ese momento, al borde de la muerte, Elsa finalmente vio la verdadera naturaleza de Javier. Hizo un juramento: si tuviera una segunda oportunidad, repararía el daño hecho a su hijo biológico y revelaría el verdadero rostro de su hijo adoptivo. Su deseo se cumplió: Elsa despertó tres años atrás. Esta vez, no iba a dejar que nada se interpusiera en su camino para cumplir su promesa.